Siempre que pensamos en sostenibilidad, el plástico suele salir mal parado. Y ese es un error en el que no debemos caer.
Contrariamente a lo que se suele creer, no todo el plástico se fabrica a partir del petróleo, ni mucho menos. Por ejemplo, los bioplásticos se fabrican a partir de materiales vegetales.
También son muy sostenibles algunos tipos plásticos como los de origen fósil porque son biodegradables. Es decir, que se descomponen por la acción de agentes naturales, como el agua o el suelo.
Los usos del bioplástico son variados y su presencia en el mercado también es cada vez mayor.
Pero; ¿Qué son realmente los bioplásticos?
Los bioplásticos se fabrican a partir de polímeros naturales de procedencia vegetal. Que sean de origen biológico no les impide prestar la misma versatilidad y resistencia que los que son de origen petrolífero. Por esta razón, son plásticos que tienen aplicaciones en infinidad de sectores. La industria textil, la agricultura o la medicina.
Esta procedencia vegetal puede ser, por ejemplo, a partir de residuos agrícolas, restos de biomasa urbana, corteza de árbol, fécula de patata, piña, caña de azúcar…
O, proveniente del maíz, plástico llamado PLA, materia para la fabricación de Packaging de en Arplast.
Partir de estos materiales, para la fabricación del plástico, significa crear un mundo mejor. Pues con los materiales verdes estamos generando una menor huella de carbono, ya que no requiere ni procesos químicos ni petróleo.
