El proceso de branding es un proceso previo a la construcción de una respuesta en pack. Un buen estudio de valores, ventajas y oportunidades construye las claves sobre las que creamos, entre otros, los proyectos de packaging.
Un buen pack responde a un análisis de necesidades, recursos y objetivos. Normalmente estos últimos hablando de producto están claros: vender. No obstante no siempre las variables se alinean para llegar a este jugoso final de la forma más simple. Los recursos no siempre son los que el proyecto precisa, por lo que un buen enfoque garantiza un resultado más fácil de llevar a cabo.
El diseño de packaging de productos es una disciplina compleja. Las variables técnicas deben ser el primer parámetro que ha de tener en cuenta el creativo cuando plantea cómo plasmar el concepto a comunicar en el envase. La labor creativa es la respuesta al branding. Consiste en crear los elementos que van a explicar mas allá del visual, son los significados que van a generar la historia que asociamos o enlazamos mentalmente al interpretarlos.
By: Infopack